ESE DEBERIA SER YO

LA AMO (:

{one}

Otra vez, otra vez…40 malditos minutos esperándolo sentada, a mí tan puntual novio, esta es la tercera vez que me deja plantada en este mes, y lo peor de todo es que no tiene ninguna consideración, no me ha llamado para aunque sea avisarme que no vendrá y para colmo tiene el celular apagado.

Ese no es el Justin que conocí, todo se ha vuelto tan monótono entre nosotros, los primeros meses que estuve con él, fueron fabulosos, pero ahora son todo lo contrario. Quiero pensar de la mejor forma, y excusarlo, puede ser que tuvo una emergencia con su familia y por eso no pudo venir.

Mi celular vibro dentro del bolsillo de mis jeans, desee que fuera Justin, peo no fue así.

‘’Hola preciosa, porque no te vienes a la fiesta de Rayan’’

El mensaje no tenía remitente, y me pareció muy extraño ya que el único que me dice preciosa es Justin, aparte me había olvidado que era el cumpleaños de Rayan, el mejor amigo de Justin, seguro él debe de estar ahí, pero por qué no me aviso.

Vaaaa, me dije a mi misma, con o sin Justin igual me quiero divertir.

Tome mi bolso en manos, y me dirigí a la habitación de mis padres para pedirles permiso, obvio me lo dieron, pero tuve que mentir, dije que Justin iba estar ahí, pero quien sabe seguro era verdad.

Salí de mi casa, la brisa acaricio mi rosto, ya era invierno se apreciaba en el ambiente, la casa de Rayan estaba a unas 5 cuadras de la mía, así que me fui caminando, me gustaba caminar en el inverno, me relajaba.

A una cuadra antes de llegar, el ruido de la música se escuchaba a todo volumen, esta fiesta sí que prometía. Me hice paso entre la multitud para entrar, risas, baile y alcohol rodeaban la fiesta y yo esperando ver a alguien conocído para hablar.

Sinceramente todos eran extraños para mí, no había nadie de la escuela, y aparte no veía al cumpleañero por ningún lado, ni a Justin.


{two}

Entre cruces de miradas con varias personas, encontré a Rayan, fui hacía el para saludarlo

-        Rayannn!- lo llame o mejor dicho le grite, pues el ruido no dejaba hablar a nadie.

-        ¿Mileyqué haces acá? – me pregunto muy sorprendido

-        Como que, que hago acá, es tu fiesta de cumpleaños, viene a celebrar contigo- le conteste divertida.

-        ¿Si, pero y Justin? –  me pregunto nervioso

-        ¿Justin qué? – le respondí con otra pregunta. – lo has visto, se supone que teníamos una cita, pero nunca aparecio.

-        Ah! – contesto dudoso. – pero sería mejor que volvieras a tu casa, él debe de estar esperándote

-        Ha no, yo me quedo, hace tiempo que no venía a una fiesta, necesito divertirme- le dije.

-        Pero sería – No escuche lo demás, puesto que alguien choco contra mí, he hizo que me diera media vuelta.

Al levantar la mirada, mis ojos se posaron en una pareja besándose, una pelinegra y un chico de castaño claro, era él.

Rayan me volteo.

-        Miley tienes que irte, enserio es lo mejor – me suplico.

Volví a girarme, era el, era el  con una chica, la cual no era yo, volví mis ojos a Rayan.

-        ¿Tú lo sabias? – le pregunte

-        Miley no yo,-

-        Pensé que eras amigos – le refute, no soportaba más quería llorar.

-        Yo no quería, Justin me dijo que te lo iba contar.

-        Contar que, que está saliendo con otra y me estaba engañando- grite exasperada-  en que mundo Rayan, en qué mundo – volví a repetir

Volvi a girar, el seguía con ella, la furia me carcomió, camine hacia ellos, pero sino antes quitarle Rayan el vaso que llevaba con un liquido oscuro.

Estuve los suficientemente cerca como para que notaron mi presencia.

-        Hola baby! – lo llame, como siempre asíamos cuando nos saludábamos. El dejo de mirar a la chica y fijo su mira en mí.

-        Miley déjame explicarte, no no lo, yo no- trato de decir

{three}

-        Si Justin, si es lo que parece, olvidaste todos los planes que hiciste conmigo, donde está el amor que decias sentir por mí, ¿Donde? – lo cuestione, mis lágrimas resbalan por mis mejillas. El simplemente se quedó callado mirándome – si tratabas de romper mi corazón lo lograste…  sabes que ya no importa, terminamos Justin–le dije, con el dolor de mi corazón. Al decir esas dos últimas palabras le vertí todo el líquido que tenía en el vaso.

Salí de ese lugar lo mas antes posible, mi nombre lo escuche gritar, pero decide mejor seguir adelante y no volver a mi pasado que significaba era él.

 . . . .

Ya han pasado 2 meses desde que ella termino conmigo, aun no me puedo perdonar por haberla engañado de esa forma, fui tan estúpi-do al hacerlo.

Ella no se lo merecía, y menos engañarla con su mejor amiga. Yo amaba a Miley, mejor dicho aun la amo, desde aquel día ella simplemente me evita.

Para mi buena suerte la vi sentada en un banco de la escuela, estaba sola, esa era mi oportunidad para hablar con ella, y poder expresarle lo que aun siento.

-        Miley - la llame, ella volteo  donde provenía mi voz, pero de un modo tan brusco la expresión de su rostro cambio al verme, ella se parado instantáneamente. – no por favor no te vallas, solo quiero hablar – le suplique

-        ¿Hablar?, ¿Ahora?...– me respondió

-        Quería pedirte disculpas, por lo que paso – le dije

-        Creo que es demasiado tarde para eso – me contesto desaminada

-        Si, pero es que – trataba de decirle lo que sentía, pero alguien nos interrumpió –

-        Nos vamos muñequita– la llamo él. Ella sonrió tan tiernamente, como cuando lo hacía conmigo.
 
-         Si Nicky - sonriendo enamorada.

-        Lo siento Justin me tengo que ir, cuídate – se despidió sin más de mí. Tomo de la mano al chico, mientras se alejaban de mi.

-        Adiós  Miley -  susurre.

Mi Mili, pero ya no era mía, sino de otro. Me arrepiento, porque Ese Debería Ser Yo sosteniendo su mano, Ese Deberia Ser yo haciendola reir. ESE DEBERIA SER YO