& todo esto me paso ami :'(

Estaba feliz de sentirle cerca, mi amor por él superaba los límites de lo racional.
Me dirigí al lugar donde habíamos quedado. Llegué temprano, llevaba más de dos semanas sin verle y sinceramente le extrañaba demasiado.
Esperé unos minutos más, había llegado demasiado puntual y se sorprendió al verme allí, parecía que venía practicando algo. Le sonreí y me acerqué a él para abrazarle
— ¡Nickie! — le rodeé con mis brazos — Estás hermoso amor — me dedicó una sonrisa torcida y le sujeté por las mejillas para besarle pero, ese beso no era como los que me daba cuando llevábamos tanto tiempo sin vernos, no era hambriento, ni apasionado, ni siquiera dulce, era un simple e insípido contacto de labios, como besar a un actor — ¿Qué te ocurre Nick? Te noto extraño

Sus enormes ojos parduzcos se posaron sobre los míos, preocupados.
Ahora venía lo más difícil. Quité sus brazos de mi cuello, la tomé de la mano, observándola durante un largo rato luego la solté. Un silencio reinó durante unos eternos minutos, tenía que organizar mis ideas, tenía que ser lo más claro posible, tenía que mantener la cabeza fría.
— Miley,tenemos que hablar... — automáticamente su gesto se torció, lo había comprendido
— ¿Por... qué? — preguntó débilmente
— Déjame explicarte — sentí cómo su respiración se comenzaba a hacer mucho más agitada y su corazón palpitaba con fuerza, estaba a punto de llorar
— Explícate — tartamudeó
— Cuando me fui, conocí a una persona, creo que mis sentimientos han cambiado, te quiero pero, ya no es lo mismo, todo es diferente. Ahora ella forma parte de mí, en este tiempo jamás había sentido a nadie tan cerca de mí, nunca había sentido tan fuerte el amor
— Nick ¿No te importa que llevemos tanto tiempo juntos?¿Cómo sabes que es real?
— De la misma manera que sé que esto no lo es — sus ojos estaban inundados, agaché la cabeza, no quería
verla sufrir — Lo siento mucho Miley yo...
— ¡Eres tan injusto! — me gritó — ¿No puedes tener algo de consideración conmigo? Nicholas ¡Te amo y tu
hace dos semanas también lo hacías! ¡No puedo creer que hayas borrado todo lo que sentías de tu corazón!
— No podía evitarlo ¿Quién podría hacerlo?
— Alguien que de verdad me quisiera
— Yo... te quise
— ¡Eres un idiota! ¡Te odio Nicholas! — comenzó a darme puños en el pecho, llorando.

No me podía creer lo que me estaba sucediendo, Nicholas me estaba dejando ¡Por que había conocido a otra! Me
sentía a morir, como si me fuese arrancado de cuajo el corazón y lo fuese aplastado. Un dolor y una rabia
impresionante me invadieron, tenía ganas de coger a esa perra por el cuello y arrancárselo, pero ahora, me
descargaría con el estúpido de Nicholas, ese estúpido al que tanto amaba y tanto daño me había hecho.
Mi mundo se desmoronaba pieza por pieza con cada una de sus palabras y lo peor es que no tenía valor para mirarme
a los ojos.
— Lo siento — fueron las últimas palabras que dijo antes de dejarme allí tirada en aquél parque, cerca de
nuestro árbol donde tiempo atrás habíamos escritos nuestros nombres rodeados de un corazón. Me detuve a
observarlo, me recordaba que él me había prometido amor eterno aquella noche en la que me pidió que me casara
con él. Cogí mis llaves y lo taché con ira, luego regresé a mi apartamento. Toda mi habitación estaba llena de
fotos y recuerdos, verlos me hacía daño, me hacían llorar, sentirme miserable como si no fuese significado nado
para él, como si no fuese sido lo suficientemente buena, como si no le fuese dado todo mi cariño, todo mi amor,
todo... todo de mi... Todo estaba lleno de regalos, de cuando me consiguió el enorme peluche en la feria, los
billetes del avión que tomamos cuando estuvimos en Punta Cana... todo lo que representaba nuestro amor. Lo guardé
todo en un baúl bajo la cama, no podía deshacerme de todo, amaba a Nicholas con toda mi alma.
Me fui dejándola allí, estaba destrozada, enojada, triste... Le había hecho daño, aquello no me hacía muy feliz, pero se trataba ahora de mi felicidad, ojalá todo fuese terminado de otra manera.
Caminé hacia mi casa y telefoneé a mis hermanos, necesitaba algo de apoyo moral. Llegarían una hora después, mientras les esperaba me serví una copa coñac en un vaso, tocaron el timbre, eran ellos. Abrí y entraron sentándose en el sofá.
— ¿Para qué has llamado Nick?
— Corté con Miley,la he dejado.
— ¿Qué?¿Por qué? — inquirió Joseph alterado, adoraba a ___(TN)
— Me cansé de ella — dije con indiferencia
— No, enserio — no lo creían — ¿Cómo te vas a cansar de ella Nick?
— Conocí a Courtney —
— ¿Courtney?¿Quién es esa? — preguntó Joe asqueado — Tiene nombre de... — le interrumpí
— Cuando viajamos con la empresa... ella nos sirvió de guía y... me enamoró
— ¿Enamoró?¿Y ella qué?¿Miley se ha quedado tan pancha?
— Se lo he explicado, creo que es suficiente.
— No lo es en absoluto Nicholas, me parece inmaduro que tires todo por la borda por un simple capricho
— ¿Todo?¿Qué todo Kevin? ¡Courtney no es un capricho! — elevé el tono de voz
— Ibas a casarte con ella, iban a mudarse juntos, Nicholas ¡Tenían un futuro! — dijo mi hermano enojado
— Yo sé lo que me hago Kevin
— Pues si tanto lo sabes no sé para qué nos has llamado
— Yo tampoco lo entiendo Nick — le apoyó Joe — Creo que no hacemos nada aquí. ¿Nos vamos Kev?
— Chicos por favor, no sean inmaduros, pensé que estarían de mi lado
— ¿Inmaduros nosotros? Inmaduro tú, por supuesto que no te apoyamos, no tienes razón, y sí, nos vamos Joe —
se levantaron y se fueron de mi casa, me daba igual, seguía convencido de que lo que había hecho era lo
correcto. Dí un par de tragos más a mi copa, quizás me pasé pero ¿Y qué?
Nicholas no valía la pena, desde luego que no la valía, ninguna persona hubiera dejado a su pareja por ese
motivo. Cerré los puños y sentí el anillo en mi dedo anular izquierdo, lo observé igual que había hecho él
unas horas antes, de pronto lo sentí como si fuera de plomo, como si quemase.
Rodeé mis piernas entre mis brazos y otras nuevas lágrimas rodaron por mis mejillas.
— ¡Maldito seas Nick Jonas! — con los ojos cerrados saqué el anillo de mi dedo y lo tiré a alguna parte de
la habitación, no quería volver a oír hablar de él, tenía que sacarle de mi mente como fuera, aunque me
costase horrores, tenía que olvidarme de él.
No era tan fácil olvidarle como me había propuesto tres meses atrás. No si tenía que encontrármelo todos los
días cuando iba a trabajar, no si había comprobado que era feliz, no si le veía comiéndose con su nueva novia y
mucho menos si él no sabía que esperaba un hijo suyo.
& todo esto me paso ami..
---------------------------------------------------Fin :)